Situada en la vía principal de Cuevas Bajas, La Calle Real, encontramos una de las fondas más importantes de la localidad datada del siglo XIX. Toda la comarca ocupa un lugar estratégico en el corazón de Andalucía, por lo que ha sido paso obligado desde la antigüedad para ir de la Andalucía Oriental a la Andalucía Occidental. Además, este lugar por su posición estratégica en el principal triangulo del bandolerismo (Antequera, Lucena y Écija), fue cobijo para un gran número de forajidos, entre ellos algunos famosos como el Chato de Benamejí o Antonio Vargas Heredia.